viernes, 17 de agosto de 2012

Recetas marinas: Salmón con tomate cherry, jengibre y wasabi en salsa de cebolla


Esta receta tiene ya su tiempecillo, pero hasta hoy no me he decidido a sacarla. Es fruto de un día de necesidad de cocinar algo rápido y sano... y con pescado.

Los pescados que más me gustan son los más carnosos. Pez espada, pez emperador (nunca sé si es lo mismo que el espada), atún, bonito, salmón... peces que sean consistentes, que llenen y que se asemejen a un filete de carne.

El pescado elegido hoy por Cunsi es el salmón. Teníamos unos tacos aún en el congelador y decidimos que iba siendo hora de usarlos. Teníamos una cebolla que iba a ponerse mala y aprovechamos para intentar el clásico "pescado con cebolla" pero al final salió otra cosa diferente.

La receta se puede hacer en unos diez minutos tranquilamente, veinte si quieres que quede un caldo excepcional. Receta rápida donde las haya ;)



El material usado:


- Sartén ancha y profunda (yo he usado un wok)



Los ingredientes:


- Salmón
- Jengibre
- Wasabi
- Cebolla
- Tomate cherry
- Pimienta negra
- Sal ahumada



El proceso:


La parte más trabajosa de esta receta es preparar los ingredientes. Para dos personas que quieran cenar sin inflarse a comida: Una rodaja de un centímetro de jengibre pelada y rallada o cortada muy muy fina, media cebolla en tiras finas, cuatro o cinco tomates cherry partidos a la mitad y ya está. Bueno, vale, salmón al gusto :)

La gracia de esta receta se basa en cómo vamos a cortar el salmón. Lo haremos en filetes muy delgaditos que no se rompan, de más o menos un centímetro. La idea es que luego se puedan hacer rápido sin pasarse y sin casi calor :)

Volviendo al tema, lo primero que haremos será preparar el caldo. El jengibre y la cebolla se pondrán a sofreir con un poquito de aceite hasta que la cebolla empiece a coger color marrón oscuro. Es en este momento cuando echaremos agua (no demasiado), una puntita de cuchillo de wasabi, la pimienta negra y la sal ahumada.

Dejaremos que vaya reduciendo tranquilamente y cuando empiece a escasear el líquido, pondremos los tomates para que queden blanditos. Finalmente, pondremos las láminas de salmón, apagaremos el fuego y dejaremos reposar el salmón.

Al principio pensareis que esto es un timo y que ese salmón no va a hacerse jamás. Ay, incrédulos. Se hará, lento, muy lento, pero se hará. A los diez minutos vereis que la tonalidad ha cambiado por completo y que ya está hecho. También podeis pasar a los cinco minutos y dar la vuelta a los filetitos de salmón para que se acaben de hacer con el calor residual.

Como os decía antes, el salmón quedará blando a más no poder en la boca. No tendreis casi ni que masticar. Y los tomates, cuando los metais a la boca, vereis cómo explotan y tienen un sabor espectacular.



La finalización:


Apilaremos el salmón como si fuera un magret de pato, en una bandeja alargada. Los tomatitos los iremos dejando alegremente repartidos y finalizaremos con la mezcla de cebolla y salsa :)

Ya sólo nos queda sentarnos a la mesa y disfrutar de este plato templado, que es como mejor se disfruta :D

6 comentarios:

  1. Vi la foto en Facebook rapidito y pensé que era solomillo. Pero que bueno darle al link y encontrarme esta receta maravillosa.
    El salmón hasta al vapor se cocina de maravillas en poco tiempo. Te creo que se cocina rapidito en esa salsa tan rica ;-)
    Buen fin de semana,
    Vero

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    Respuestas
    1. Mucho mejor que un solomillo, te lo puedo asegurar ;)

      El truco es cortarlo lo más fino posible para que se haga con el mínimo calor posible y quede lo más jugoso que se pueda :D

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  2. Que cosa más buena!! me gusta ese toque especial!!!!

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  3. ¡¡ Gracias Manu, fue una receta no planificada un día que tenía prisa y se me hacía tarde para comer !!

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